FSC-CCOO Aéreo | 19 abril 2024.

28 de abril - Día Internacional de la Salud y Seguridad en el Trabajo

    FSC-CCOO, que rechaza el contenido del anteproyecto de la Ley de Mutuas y se opone a que éstas intervengan en la gestión de la enfermedad común, presenta un vídeo en el que denuncia el anteproyecto aprobado por el Gobierno y alerta de las múltiples consecuencias negativas para la salud de las personas trabajadoras.

    24/04/2014.

    El Consejo de Ministros aprobó el 20 de diciembre de 2013 el anteproyecto por el que se modifica la Ley General de la Seguridad Social en relación con el régimen jurídico de las mutuas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales. Hasta ahora, las mutuas, formadas por asociaciones de empresarios, se hacen cargo del salario de las personas trabajadoras y asumen competencias en la expedición de bajas y altas médicas en caso de accidentes o enfermedades producidas en el trabajo. Pero con la reforma planteada por el Gobierno, estas empresas, que pasarán a denominarse "mutuas de la Seguridad Social?, también gestionarán las enfermedades comunes de las trabajadoras y trabajadores.

    La Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) de CCOO rechaza el contenido del anteproyecto de la Ley de Mutuas y se opone a que éstas intervengan en la gestión de la enfermedad común. Para explicar su posición ante esta reforma, esta federación de CCOO ha elaborado un vídeo en el que denuncia algunas de las consecuencias que podrían llegar a tener con su aprobación y propone, en el caso de que se apruebe esta ley, que se negocien cláusulas en los convenios colectivos que limiten su aplicación, y que se fomente la elección de delegadas y delegados de prevención, así como comités de seguridad y salud laboral en las empresas y administraciones públicas.

    Durante la tramitación parlamentaria, CCOO tratará de frenar esta norma o al menos suavizar su aplicación porque "la salud de la gente que trabaja no puede estar exclusivamente en manos de las mutuas. No podemos olvidar que aunque gestionan dinero público de la Seguridad Social que cotizamos todos y todas las trabajadoras, son asociaciones de empresarios que defienden sus intereses.

    Consecuencias de la aprobación de esta ley

    La aprobación de esta ley, tal y como está planteada, tendrá muchas consecuencias negativas para quienes trabajan.

    Las mutuas serán las que decidan sobre las altas médicas y, ante una propuesta de alta, el médico de atención primaria o la inspección médica previsiblemente sólo dispondrán de cinco días para confirmar su diagnóstico y el alta o la baja correspondiente. Si en ese plazo no se pronuncian, aunque sea por estar desbordados o pendientes de pruebas, será la mutua quien decidirá sobre la salud del trabajador.

    Asimismo las mutuas podrían llegar a forzar el alta de las personas enfermas para incorporarlas cuanto antes a su puesto de trabajo, con el riesgo de que empeore su salud y de que las bajas reiteradas, por no haberse curado adecuadamente, puedan acabar en despido.

    El trabajador enfermo se convierte en motivo de sospecha, ya que se viene a confundir dos conceptos diferentes: el absentismo, situándolo en paralelo a la incapacidad temporal.

    Estas son algunas de las múltiples consecuencias negativas que tendrá esta ley para las trabajadoras y trabajadores. CCOO desarrollará una campaña para informar adecuadamente sobre la importancia de que esta reforma no se apruebe tal y como está planteada en el anteproyecto, y aportará sus propuestas para tratar de corregir la desprotección y el perjuicio en la salud de todas las personas.

    La salud es un derecho, no un privilegio.